Hoy se cumplen 8 años de la muerte de nuestra eterna Princesa Leia, la actriz Carrie Fisher, quien falleciera a sus 60 años el 27 de diciembre de 2016 a causa de problemas cardíacos.
Fisher no sólo es recordada por ser un ícono feminista (revisar la nota de de TeenVogue) o por su activismo creativo y empático relacionado con las adicciones y los problemas de salud mental. Vivió ella misma estos dos temas con su adicción a la cocaína y heroína y su diagnóstico bipolar. Por esto último, en 2016 la Universidad de Harvard la galardonó con el premio anual Outstanding Lifetime Achievement Award in Cultural Humanism.
Recordamos también su activismo por los derechos animales, en específico contra el Festival de Yulin en China, el más grande de los festivales de carne de perro. En el 2016 se unió a un grupo de activistas para protestar frente a la embajada de China en Londres. Junto a su perro Gary (quien ayudaba a Fisher a controlar su desorden bipolar) explicó en dicha oportunidad: «hay tanto sufrimiento animal en el mundo, y en gran parte te sientes impotente para acabar con él, pero detener el festival de carne de perro de Yulin y acabar con todo ese sufrimiento es fácil… Todo lo que tienen que hacer las autoridades chinas es declararlo clausurado, y la matanza se detiene”, y agregó que «estos pobres perros necesitan que luchemos por ellos. Cada uno de ellos es tan precioso como mi querido Gary, cada uno de ellos es el mejor amigo de alguien» (Express, 2016).
¡Que la fuerza esté siempre contigo Princesa!
